Los asistentes acordaron dirigir nuevos escritos y alegaciones al Alcalde de Totana y al Consejero de Urbanismo de Murcia rechazando que todas las fincas de la Sierra se han reclasificado como protegidas.
En la noche del viernes se celebró en los salones del restaurante El Mandola, una asamblea informativa con los vecinos y propietarios de la zona de la Diputación de la Sierra, a fin de explicar cómo se clasifican esas fincas a efectos de hacer edificaciones agrícolas o viviendas unifamiliares aisladas, según lo establecido en el Plan General de Ordenación Urbana de Totana (PGMO), pendiente de aprobación definitiva en Murcia, tras de su ratificación y subsanación por el Pleno del Ayuntamiento del pasado 28 de julio, con los votos en contra de los Concejales del PSOE.
La reunión había sido convocada por la Unión de Agricultores y Ganaderos del Bajo Guadalentín (COAG), por la Asociación de Vecinos de la Sierra y por APESE (Asociación de Propietarios de Sierra Espuña). Por lo que ocuparon la mesa presidencial: Isidoro Cayuela (COAG), Diego Sánchez (Asociación de Vecinos), José Luis Hernández (APESE) y Salvador Murcia (Pedáneo de la Sierra).
También asistió como invitado a la reunión, el Concejal de Urbanismo del Ayuntamiento por el PSOE, Carlos Ballester, quien aclaró que participaba en la reunión no como Concejal de Urbanismo, sino como Concejal responsable y representante de urbanismo del PSOE de Totana.
El presidente de APESE y CEBAG, José Luis Hernández, recordó a los asistentes los sucesivos cambios en las exigencias de metros de fincas rústicas de distintos parajes de la Sierra para construir una edificación agrícola o una vivienda unifamiliar aislada en las distintas versiones de los planos, desde el Plan inicial de PSOE-IU de 2002, hasta la versión de 2015 y 2016, que se encuentra en trámite de aprobación en Murcia, pasando por las versiones de 2004, 2008 y las directrices aprobadas unánimemente por el Pleno de la Corporación en diciembre de 2011 con apoyo de todos los Grupos Políticos.
Según explicó Jose Luis Hernández, en la casi totalidad de las versiones anteriores se autorizaba la posible edificación en fincas de 5.000 m., en la gran mayoría de los parajes de la Sierra (Llano de las Cabras, Santa Leocadia y Purgatorio, Alquerías y Molejones), mientras que en el Plan remitido a Murcia para su aprobación, se reclasifican los terrenos a protegidos o no urbanizables, exigiendo para la edificación de vivienda unifamiliar aislada un mínimo de 10.000 m. que según explicó se convierten en 20.000 m. en Molejones y Alquerías (Parajes en los que hasta ahora se pueden edificar con las Normas Subsidiarias en 5.000 m.), mientras que se sitúan en 50.000 m. en Santa Leocadía y Purgatorio y en 100.000 en el Llano de las Cabras.
Explicó también el Presidente de APESE que esta reclasificación a protegidos de todos, absolutamente todos, los parajes de la Sierra de Totana, contrastaban con la regulación de los terrenos colindantes del término municipal de Aledo, donde se preve la posibilidad de hacer una vivienda unifamiliar en 2.500 m., en terrenos de las mismas características que las de Totana. Además de la contradicción de que mientras que según manifestó el Presidente de APESE se expropiaba de forma encubierta parte de los actuales usos de las fincas y la posibilidad de que se pudiesen construir una edificación agrícola o una vivienda unifamiliar con las actuales exigencias, se mantenían clasificadas como urbanizables no sectorizados y sectorizados (urbanizaciones), algunos convenios con cientos de viviendas, en varios parajes de Mortí, colindantes con el Sur del Parque Regional de Sierra Espuña.
También se comentó en la reunión que lo que se preveía por el nuevo Plan era empeorar las condiciones para la edificabilidad en la Sierra, ya que en la zona de las Alquerías y los Molejones las Normas Subsidiarias de 1981, hoy aún vigentes, requieren 5.000 m.
El Concejal Carlos Ballester agradeció la invitación a la reunión y reiteró que participaba en ella no como Concejal de Urbanismo, sino como Concejal responsable de Urbanismo en representación del PSOE, a la vez que manifestó que desde el PSOE coincidían, a grandes rasgos, con el relato de la situación. Así como con la posición de los vecinos de la zona, y que el PSOE seguía creyendo que se tenía que haber consultado con los vecinos de la Sierra y con los de otras zonas y con los del casco urbano, para fijar entre todos las condiciones de edificabilidad del PGMO de Totana, de acuerdo con el modelo de desarrollo económico y de ciudad propuesto y consensuado por los vecinos y posteriormente consensuado por todos los Grupos políticos, de acuerdo con los intereses generales de los ciudadanos.
Hizo referencia también Carlos Ballester a que coincidían en que el acuerdo de directrices aprobado unánimemente en diciembre de 2011, podía ser un buen punto de partida para generar un nuevo modelo y un nuevo Plan modificado, a la vez que se refirió a la preocupante situación de las miles de viviendas que en el casco urbano se quedarían fuera de ordenación y a las consecuencias tan negativas que ello tendría para miles de propietarios y vecinos.
Tras de varias intervenciones de los asistentes, alguna de ellas reprochando al Concejal los graves perjuicios que el incumplimiento de sus compromisos y las discrepancias entre el Equipo de Gobierno, suponen para los propietarios de la zona de la Sierra; se procedió a leer y aprobar un borrador de posible escrito de alegación dirigido tanto al Alcalde de Totana como el Consejero de Urbanismo de Murcia, en la que, entre otras cuestiones, se solicita que no se apruebe el texto del PGMO remitido a Murcia y que se revoque y rectifique el acuerdo de Pleno de julio pasado y se elabore un nuevo texto de Plan, aprovechando parte del contenido y trámites ya realizados, sobre la base del acuerdo político unánime del Pleno del Ayuntamiento de 29-12-2011.