El Pleno del Ayuntamiento de Totana acordó, en su última sesión, por mayoría, efectuar un reconocimiento público a la familia de alfareros Tudela, que representa la séptima generación de este oficio en Totana, en este caso, a las figuras de Francisco Tudela Tomás y su hijo Francisco Javier Tudela, como representantes genuinos de este milenario y noble oficio.

Los corporativos aprobaron la moción de la concejal de Artesanía, Antonia Camacho, para tal fin; así como la instalación de una placa conmemorativa junto al Monumento al Alfarero de Totana, en la calle Don José María de esta localidad.

En la moción, se recordaba que la familia Tudela es un ejemplo claro de lo que significa la alfarería y la artesanía en Totana, representada actualmente en la séptima generación por Francisco Javier Tudela que obtuvo en 2015 el Premio Nacional de Artesanía en la Modalidad de Innovación y Desarrollo.

En la propuesta de la Concejalía, se argumentaba que éste es un alfarero artesano que demuestra, en el día a día, su capacidad de mejorar, superar dificultades y exponer sus obras de arte en el barro, en varios puntos de la Región de Murcia y España.

Su padre, Francisco Tudela Tomás, es otro ejemplo de artesano del que Francisco Javier ha heredado su capacidad e imaginación.

Francisco Tudela, junto a su hermano Conrado y su padre Bartolomé, mantuvieron el oficio en la calle Caridad, junto a la rambla de la Santa hasta hace unos años, pasando a modernizar sus instalaciones, actualmente en la carretera de Mazarrón, en el extrarradio de la ciudad.

La moción recoge que estos son ejemplos vivos -padre e hijo- de una saga de artesanos que se remonta con anterioridad a 1786; y se da la circunstancia de que Francisco Tudela Tomás, ejerció el cargo de concejal responsable del área de Artesanía en el Ayuntamiento de Totana durante años y con una gestión comprometida en defensa de alfareros y artesanos durante dicho período.

La iniciativa señalaba que referirse a Totana es hablar de alfarería y artesanía a lo largo de su historia; aunque la situación económica, la globalización y otros elementos han complicado de una forma muy sería la viabilidad actual de este sector artesanal, los alfareros de Totana mantienen una lucha constante por la innovación y la puesta al día de técnicas y canales comerciales para mantener este "oficio noble" que es el arte de modelar el barro y crear obras de arte.