Nintendo debuta en el sector de los dispositivos móviles, por eso, cabe destacar la estrategia de marketing que la marca está llevando a cabo y las consecuencias de ello.
El mercado de los videojuegos podría representar hasta 84.1 mil millones de dólares para 2017, para llegar a los casi 90 mil millones de dólares en 2018, según estimaciones de PwC.
Tal como el creador de Mario, Shigeru Miyamoto, anunció en el Apple Event, realizado en septiembre de este año, el 15 de diciembre llega Super Mario Run al iPhone.
Se adelantó que tendría un coste de 10 dólares, de acuerdo con la compañía y se lanzó un video con lo que veríamos en el esperado videojuego.
Se sabe que es importante para Nintendo, ya que después del anuncio en septiembre, de inmediato subieron sus acciones más de 20 por ciento en el mercado bursátil, por lo que la marca sabe que el nuevo juego del personaje es un producto que la gente espera con ansía, más aún con lo reflejado en redes sociales.
Más allá de lo que representa para la marca, se debe hablar de lo relevante en marketing, ya que Super Mario Run será el debut de la franquicia en dispositivos móviles.
La empresa se resistía a crear la versión para smartphones. Ahora, de la mano de Apple, intentarán una nueva estrategia que abre las puertas a una suma de mercados, el de los videojuegos y de los smartphones.
Las cifras muestran que Nintendo obedece a lo que dicta el comportamiento de los consumidores, ya que mientras este 2016 el 37 por ciento de los usuarios ejecutaron videojuegos en su computadora, en 2017 disminuirá a 26 por ciento, ya que se prevé que el porcentaje de quienes los juegan en smartphones y relojes inteligentes pase de 27 (en 2016) a 30 por ciento, según Newzoo.
Así, se demuestra el poder del consumidor, que lleva a las compañías, incluso del tamaño de Nintendo, a adaptar sus productos y no al revés.
