En el pasado pleno ordinario del Ayuntamiento de Totana, se aprobó la moción que presentó Ganar Totana-Izquierda Unida en la que se instaba al Gobierno de la Región de Murcia a amortiguar los efectos del impuesto sobre el depósito de residuos en vertederos, que se aplica desde 2023.
La Ley 7/2022, proveniente de normativa europea, establece una carga fiscal al depósito de residuos en vertederos. Así, cuantas más toneladas de residuos no reciclables produzca un Ayuntamiento, más impuestos tendrá que pagar. En Totana, esto implica más de 30.000€ mensuales, rondando los 400.000€ anuales. Este nuevo impuesto lo recaudan las Comunidades Autónomas, y su objetivo es incentivar medidas que fomenten el reciclaje y reduzcan la generación de residuos. No obstante, mientras otras Comunidades han implementado esas medidas, la Región de Murcia está recaudando el impuesto sin haber realizado ni planificado absolutamente ninguna inversión con ese dinero.
Además, la ley establece que los Ayuntamientos están obligados a repercutir ese impuesto en el recibo a los vecinos. El plazo para que los municipios aprueben esa subida en la Tasa de la Basuras finaliza el próximo mes de abril, sin que la Comunidad Autónoma haya llevado a cabo ninguna medida para amortiguarlo, a pesar de haber estado recaudando ese impuesto ya dos años.
"Dos años después de la aprobación de la ley, el gobierno de López Miras sigue sin haber movido un dedo por reducir el coste para los Ayuntamientos y para los vecinos", asegura Pedro José Sánchez, portavoz del Grupo Municipal. Para Ganar Totana, "no se puede concebir que el gobierno regional esté a la vez criticando el impuesto y beneficiándose de su recaudación para no se sabe qué menesteres".
Por ello, en la moción aprobada por el pleno, Ganar Totana reclamaba a la Comunidad que devuelva el coste del impuesto a los Ayuntamientos, condicionado a que éstos inviertan en medidas para aumentar el reciclaje dentro del municipio: más cantidad de contenedores de separación, campañas de reciclaje… porque esas medidas repercuten a la vez en una mejora de los servicios a la ciudad, en la reducción de los residuos y en que a los Ayuntamientos les salga más barato el depósito de basuras en el vertedero.
Hace dos años, el pleno del Ayuntamiento aprobó por unanimidad una propuesta similar. Hoy, el PP se abstiene y Vox vota en contra de la misma propuesta. Durante esos dos años, el Gobierno Regional no ha movido ficha y tanto el PP como Vox sólo se han dedicado a criticar al Gobierno de España por un impuesto que viene de normativa europea del que además su gobierno regional se está beneficiando.
En definitiva, los totaneros van a ser espectadores en los próximos meses de una subida en la Tasa de Basuras que se les cobra, sin que eso repercuta en una mejora de los servicios; y es por una pura decisión política del gobierno de López Miras. A ello se suma la indefensión de los vecinos de Totana, dado que el gobierno local del Partido Popular no va a defender tampoco sus intereses y se suma a una guerra política que sólo pretende desviar la atención.
